Coca en tomaca i farina

Cuando hay una celebración informal, una merienda o una excursión al campo, en Cocentaina siempre hay alguien que dice "Jo faré una coca en tomaca, que m´ix molt bona".

Ingredientes para la masa
  • 500 gr de harina
  • sal
  • 1 sobre de levadura
  • 100ml de aceite de oliva
  • 100 ml de leche
  • 100 ml de gaseosa (tipo "Casera")
Ingredientes para cubrir
  • harina
  • sal
  • aceite
  • tomate triturado
  • pimiento rojo y verde
  • un poco de azúcar
  • piñones
  • 1 lata de atún en aceite
Mezclar y amasar los ingredientes de la masa, tamizando la harina junto con las sal y la levadura, y extender la pasta encima de una lata aceitada, y dejar reposar un rato para que fermente.

Encender el horno a 200 grados para que vaya calentándose.

Mientras tanto, se fríe en el aceite el tomate junto con el pimiento, se prueba de sal y se añade el azúcar para rectificar la acidez. Se añaden los piñones y el atún escurrido de su aceite, y se mezcla bien, aunque estos 2 ingredientes no son imprescindibles. Este frito se echa sobre la mitad de la masa que hay en la lata. Sobre la otra mitad ( o menos, como vemos en la foto), se echan unos puñaditos de harina que no quede muy gruesa, sal y se cubre con aceite, y tenemos las dos versiones de la coca, ya que la de harina es más pesada.

Entramos la lata en la mitad del horno precalentado, sin aire, durante 30-40 minutos, o hasta que esté cocida.

Sorbete de limón

     Esta receta de sorbete la encontré en un foro de internet, buscando para las cenas de las fiestas navideñas. La hicimos Vero y yo, ella para la cena de Nochebuena y yo para la de Nochevieja. Nos encantó. Si alguien ha sido el inventor, muchas gracias, pues no es la receta que figura en mis libros de Thermomix.


Ingredientes
  • 3 limones limpios, troceados y sin huesos
  • 200gr de azúcar
  • 1 bote de leche Ideal
  • 800 gr hielo (si es industrial, remojarlo antes para que no esté hecho un bloque)
Poner todo en el vaso de la Thermomix y triturarlo a velocidad progresiva 5-7-9 durante unos 40 segundos (o el tiempo que os haga falta, yo tuve bastante con ese).

Sopa cubierta

     Edición de 2017 
     Siento la necesidad de editar esta entrada, porque me gusta asociar las recetas a anécdotas o vivencias que hata tenido alrededor de las mismas. Esta fue una de mis primeras entradas, hace ya más de 7 años, y sigue siendo una de mis sopas favoritas. Y recientemente, algo me ha hecho recordar muchas cosas.
     La nochevieja de 1991 fue  mi primera nochevieja de casada y de vivir en Cocentaina. Y se nos ocurrió que vivniesen nuestros amigos a cenar a casa, para irnos de fiesta por Alcoy. Que se quedasen a dormir en las camas, sofá y sacos de dormir,  y al día siguiente, comer y volverse a Valencia. Juan Carlos, Fabio, Grafi, Roberto, Javi, Paco y nosostros dos. Yo era la única chica, la anfitriona, y la encargada de hacer la cena y la comida del día siguiente. Tuve que madrugar para ir a la pescadería antes de ir al trabajo, y tener los ingredientes preparados para cocinar después de volver, pues estaba de guardia localizada hasta las 5 de la tarde y no habían teléfonos móviles. Porque sí, existía vida, quedábamos con los amigos y llegábamos a los sitios antes de existir los teléfonos móviles, pero yo no podía despegarme del fijo por si me llamaban.
    Hay  montones de anécdotas de aquella noche: el frío al que todos estábamos desacostumbrados,  la valentía de alguien saliendo al balcón que fue celebrada por sus amigos encerrándolo en él y no dejándole entrar hasta que no enseñó el culo, el romance de otro con mi mono de peluche, la curiosa manera de éste mismo de comer sopa, los ronquidos de otro, alguien  que otro solo durmió desde que se despertó quien roncaba....y la sopa.
     Poco recuerdo del menú, salvo las gambas y la sopa. Y la sopa me la han hecho recordar ellos de vez en cuando. Un plato al que yo apenas dí importancia. Pero años (muchos) después, uno de ellos refería con nostalgia, cómo después de una noche de juerga y poco dormir, a la hora de comer había "una sopita cubierta", lo cual le llenó de alegría. Y hace unos días, otro de ellos, al invitarlo a mi casa y ofrecer que eligieran lo que quisieran comer, me volvió a recordar aquella sopa cubierta que era igual que la que hacía su madre. Más de 25 años después aún se acordaba, y a mí me llenó de alegría. Y, como en este blog no sólo apunto recetas, sino también trozos de mi vida, he querido actualizar esta entrada porque no incluía aquella Nochevieja de mis 24 años, con los amigos. Siempre (que me aviseis) tendreis un plato de sopa cubierta en ésta que ha sido, es y espero que sea siempre, también vuestra casa. Mil besos.

     Esta es una de mis sopas favoritas, que además de sencilla de preparar y económica, se puede dejar hecha con antelación.

Ingredientes
  • 1 hueso de jamón
  • 1 trozo de jamón
  • 1 hueso de corbé (espinazo de cerdo fresco)
  • 2 carcasas de pollo
  • patas de pollo, si las tenemos
  • mollejas e higaditos de pollo
  • 1 patata
  • 1 cebolla
  • 1 tomate
  • 1 ramita de perejil
  • sal
  • 2 huevos cocidos
  • pan
     En una olla con agua se pone a cocer todo , excepto los huevos y el pan, durante al menos 1 hora, hasta que veamos que el caldo está blanco. En ese momento se aparta del fuego , se cuela el caldo y se rectifica de sal. las mollejas e higaditos se trocean pequeñitos y se añaden al caldo, así como el jamón, los restos de pollo y cerdo que puedan quedar en los huesos y los huevos cocidos.
     En el momento se servir, se pone pan en los platos y se echa la sopa hirviendo encima, pero como a nosotros no nos gusta el pan blanducho, lo pongo en un plato y cada uno se lo va sirviendo conforme le hace falta.
     El pan está mucho mejor si antes lo pasamos por el horno, por la tostadora o bien por una sartén con un poco de aceite. Y el colmo de la vagancia es poner pan tostado industrial para canapés, con lo que también está muy buena.
     Esta sopa mi madre la aprendió cuando se fue a vivir a Valencia, pero adaptó los ingredientes a su gusto, así que la receta original la desconozco, en mi casa se ha comido siempre así; a mí siempre me llamó la atención el nombre, y no sabía por qué lo de "cubierta", hasta que una vez leí, que esta sopa, todo igual pero sin pan, se pone en cuencos que aguanten el calor, se pintan los bordes con agua, y se tapan con una lámina de hojaldre, que cubre la sopa, se pinta con huevo batido, se llevan al horno, hasta que el hojaldre esté hecho y se sirven inmediatamente, pero lo que no recuerdo era donde se hacía esto. También he conocido esta sopa con el nombre de "sopa de novia", porque durante algunos años, formaba parte del menú de cena en las bodas. Otro nombre para ella es el de "sopa de menudillos", y en Cocentaina la comí como "sopa de relleno".