-Mamá. ¿existen de verdad los Reyes Magos?- me preguntó mi hija. Tendría 7 u 8 años. Quizá 9, no lo recuerdo.
-¿Quieres saber la verdad, hija?- le pregunté yo, resitiéndome, pero a la vez, rendida a lo inevitable.
-No, no quiero saberlo- me contestó ella, que nunca ha tenido un pelo de tonta- Pero, ¿tú crees en ellos?
-Por supuesto- le contesté yo sin dudarlo.
-Vale. Es que Jessica dice ...(por su...puesto, siempre hay una Jessica que dice)- aquí los padres empezamos a vislumbrar la frontera entre la importancia dada a lo que decimos nosotros y la que se le da a lo que dicen los amigos, compañeros, etc. De momento, parecía ganar yo.
Al cabo de unos días volvió a abordarme:
-Sí, mamá, sí quiero saber la verdad.
Y se lo expliqué, con delicadeza, no como me lo contaron a mí. Y enseguida vino su pregunta:
-¿Y por qué me dijiste que creías en ellos?
La respuesta sigue siendo la misma. Porque creo en la magia de los Reyes Magos. Porque creo en la ilusión de los niños, que se explican lo imposible de la manera más sencilla para justificarla. Porque creo en la complicidad de los todavía niños, pero ya iniciados en el secreto, para que sigan teniendo ilusión los que no lo están. Porque creo en la colaboración de todos las personas para que todo esté a punto cuando ha de estarlo, a pesar de los obstáculos. Porque representan a los niños que fuimos y que en algún rincón de nosotros todavía permanecen. Porque es una fiesta para niños donde disfrutamos todos. Mi marido hizo de paje un año en la Cabalgata de Alcoy, y terminó rendido de tanto subir niños a besar a los Reyes, pero con una alegría infinita de haber visto tanta ilusión en sus caritas y por contribuido a ella . Y porque sí.
Hoy es la noche de Reyes. Nombre de resonancias fantásticas. Cuando yo era pequeña y vivía en Valencia, teníamos que acostarnos pronto y dejar los zapatos en el balcón para que los reyes nos dejasen los juguetes. Cuando me vine a vivir a Cocentaina cambié de costumbres, porque aquí Sus Majestades han pasado por las casas dejando los juguetes al paso de la cabalgata, por la tarde. Además nacieron mis hijos, y han sido las fechas más mágicas y maravillosas para mí, al poder ver las cosas a través de sus ojos. Incorporé el roscón de reyes a mis tradiciones familiares....Ya han pasado, de momento, los días de miradas y susurros, de escondrijos y sobreentendidos. Pero volverán (espero). Y mientras, seguiremos disfrutando de las miradas de niños ajenos, que lo son de todos en estas fechas.
Buena noche de reyes, gentes de buena voluntad. Y que vinguen carregats.
(Publicado en Facebook en enero de 2013)
Este año me he decidido a hacer la receta del
roscón de reyes elaborado con Kitchen Aid de
Mercado Calabajío. Como en Cocentaina los Reyes Magos vienen a las casas después de la cabalgata,el roscón he de hornearlo en la tarde del día 5 de enero. Después, pongo en el horno unos muslos de pollo a asar,y dejo el horno programado. Nos vamos a la cabalgata. Cuando eran pequeños los niños, salíamos todos juntos de casa, bueno, a veces mi marido se unía a nosotros desde su trabajo. Qué casualidad, que si estaba él en casa, siempre, siempre, se había olvidado algo, con lo que los niños y yo teníamos que adelantarnos. Qué tiempos. Estas fiestas siempre se disfrutan más cuando hay niños pequeños, ¿verdad?.
Bueno, la cuestión es que veíamos la cabalgata, y de ahí a casa. ¡Qué gusto daba entrar en ella!. De la calle de una fría noche de enero entrábamos en el comedor calentito, con un olor a pollo asado estupendo, y encima, ya habían venido los Reyes!!!
Ingredientes
Prefermento
- 25 gr de levadura fresca (u 8 gr de levadura liofilizada)
- 140 ml de leche tibia (no gr)
- 160 gr de harina de fuerza
Masa
- 400 gr de harina de fuerza
- 150 gr de azúcar
- La piel de una naranja
- La piel de un limón
- 1/2 cucharadita de sal
- 2 huevos medianos y 1 yema
- 100 gr de mantequilla en pomada
- 2 cucharadas de agua de azahar
- 2 cucharadas de ron
Adorno
Deshacemos la levadura en la harina, añadimos la leche, y lo mezclamos todo con el accesorio mezclador durante 2 minutos, a velocidad 2. Recogemos todo el prefermento con la rasqueta, tapamos bien el bol y lo dejamos reposar unas 7 horas en un lugar cálido.
Yo esta vez he tapado el vaso con un gorro de ducha desechable, que se ajusta muy bien, y lo he dejado más de 10 horas, ya que me fui de casa. Cuando volví, retomé la preparación.
El azúcar yo lo he preparado como siempre en la Thermomix. Primero programamos 30 segundos velocidad progresiva 5-10, añadimos las pieles
sin nada de blanco por el bocal, y programamos 15 segundos a la misma velocidad. Yo suelo pelar los cítricos con el pelapatatas.
Sacamos el prefermento del vaso y ponemos los huevos y la yema. Batimos con el globo hasta montar los huevos. Cambiamos al accesorio mezclador y añadimos la sal, el agua de azahar, el ron , el prefermento y la mitad de la harina. Mezclamos hasta que espese. En ese momento cambiamos al gancho amasador y añadimos el resto de la harina, y el azúcar aromatizada. Amasamos a velocidad 2-3 durante 10 minutos. Entonces echamos la mantequilla a cuadraditos y batimos hasta que se integre. Cubrimos el bol, sin sacarlo de la máquina con un par de paños de cocina y dejamos reposar 20 minutos.
Pasado este tiempo, volvemos a amasar 5 minutos más. Otros 20 de reposo, tapado, y otros 5 de amasado. Apagamos la máquina, sacamos el vaso, recogemos la masa que haya podido quedar por las paredes, le volvemos a poner el gorro de ducha, y lo dejamos reposar en un sitio cálido otras 8 horas. Es decir, toda la noche. Sin preocuparnos del horario.
Mañana del día 5 de enero. Después de desayunar, ponemos papel de horno en 2 bandejas. Carlos hace 1 roscón con esta masa, pero yo lo reparto en 2. Nos untamos las manos de mantequilla y separamos la masa en 2. La boleamos un poco, formamos el roscón en el aire, haciendo un agujero en el centro con los dedos, y lo ponemos en la bandeja de horno. Terminamos de darle forma. Escondemos la sorpresa, envuelta en papel film, en algún sitio del roscón, (yo no le pongo haba), ponemos un aro aceitado en el centro, para que al crecer no se cierre el agujero, tapamos la bandeja con papel film, y la dejamos reposar durante otras 7-8 horas. Yo, dentro del horno apagado.
Ponemos el horno a calentar a 220ºC.
Miraremos que, con la crecida, no se vea la sorpresa. Si es así, la esconderemos, pero sin manipular mucho el roscón. Lo pintaremos bien, por todas partes, con el huevo batido.
Mezclamos azúcar con agua hasta que tenga el aspecto de tierra espesa, que no quede líquido. Repartiremos montoncitos por el roscón, así como las naranjas confitadas, las guindas, la almendra en láminas o cubitos, lo que tengamos, y el calabazate, en el caso de ponerlo. Yo no lo pongo porque en casa sólo me gusta a mí y me lo acabo comiendo yo todo, lo cual mis pantalones no agradecen nada, nada. Hundimos un poco en la masa tanto las guindas, como las naranjas y el calabazate.
Horno sin aire, y algo más bajo del centro: 7 minutos a 220ºC; 15 minutos a 180ºC, y finalizar con 6-7 minutos a 160ºC. A mitad de la cocción a 180ºC he tenido que taparlo con un papel de aluminio, pues estaba dorándose excesivamente.
Dejar enfriar, y, si queremos, rellenar de nata, trufa, crema pastelera....Lo que sobre, si está relleno debe ir a la nevera. Si no, aguanta bien un par de días, pero envuelto en bolsas de congelación.
Este año he encontrado una corona en una tienda de juguetes. Veremos a quien se la ponemos.
Que vinguen carregats! es el saludo en forma de deseo de estos días por aquí. Significa "Que vengan cargados" (los Reyes). ¿A que es bonito?.
El roscón estaba delicioso. Al parecer de todos, mejor que ningún año, aunque algo menos esponjoso. En la mañana de Reyes pensaba probar qué tal había aguantado la noche, pero algún paje despistado debió terminárselo anoche, pues ni las migas quedaban. Buena señal.
Sí, me he adelantado. Así nos da tiempo a todos a pensarnos el hacerlo. Y así, además, con el dulce de acabar la navidad, la empezamos, celebrando el cumpleaños de Carmen Augusto. aunque El Corte Inglés diga otra cosa, la Navidad empieza el dia 22 con el sonido de las bolas del sorteo de la lotería, y las voces de los niños de San Ildefonso cantando los premios. Pero para nosotros, empieza hoy, celebrando el cumpleaños de Carmen. Que cumplas muchos más.