Arroz con patas

     Hay guisos que forman parte de nuestro menú habitual durante largos periodos de tiempo. Y nos encantan. Un día, sin saber por qué, desaparecen de nuestra mesa. Y no los echamos en falta, hasta que, por casualidad, un día vemos ese ingrediente, o recordamos, o....Eso me pasó a mí al encontrar las patas de cordero en la carnicería. Durante mucho tiempo, era una plato habitual en casa de mis padres, y nos gustaba mucho a todos. Y de eso han pasado más de 20 años. Cuando en el mostrador de la carnicería vi las patas, no me cupo la más mínima duda. Gracias a que tenía la receta apuntada, pude recuperar el plato que nos hacía mi madre. Muy rico, un arroz de cuchara para el invierno, y aunque en la foto aparezca  seco, es caldoso.

Ingredientes

  • 2 patas de cordero por persona
  • Garbanzos
  • 1 hueso de jamón
  • Tomate rallado
  • 2 ajos
  • Aceite de oliva
  • Arroz
  • Azafrán

     La víspera, ponemos en remojo los garbanzos y el hueso de jamón.
     El día de autos ponemos al fuego una olla con agua y el hueso de jamón. Cuando hierva, añadimos los garbanzos y dejamos cocer.
     Aparte, ponemos el aceite en una sartén y vamos sofriendo las patas, y echándolas a la olla. Una vez sofritas todas, freímos el tomate y los ajos bien machacados, y también lo añadimos a la olla.
     Requiere bastante cocción por los garbanzos y las patas. También puede cocerse en la olla exprés, pero cociendo después unos 20-30 minutos con la olla destapada, para que el caldo coja cuerpo.
     Añadimos unas hebras de azafrán.
     Una vez bien cocidas patas y garbanzos, añadimos la sal, probamos y cocemos el arroz.
     Y servimos los platos. Y volvemos a la casa de mis padres, un domingo a mediodía, a comer un delicioso arroz con patas.


Centollo

     A mí me encanta el marisco, pero a mi familia no, así que lo hago muy de vez en cuando, y ésta ha sido una de esas veces, ya que tenía invitados, y me he dado un homenaje.

Ingredientes

  • Centollo
  • Agua
  • Sal

     Para cocer el centollo, hay que poner una olla con agua y sal, en proporción de 70 gr de sal por litro de agua. Si el centollo está vivo, se pone en la olla con agua fría, que quede cubierto, y se va calentando el agua gradualmente. Si el centollo está muerto, lo podemos echar directamente en el agua hirviendo.
     Cuando hierva el agua, se cuenta el tiempo, dependiendo del tamaño del centollo. El mío no llegaba al kilo y lo tuve 15 minutos.
     Leo en muchos sitios que se echa laurel al agua, pero a mí no me gusta que se enmascare con el laurel el sabor del marisco, y nunca lo pongo.
     Y ya sólo nos queda la presentación. Separamos la zona abdominal y utilizamos el caparazón como recipiente, después de quitar todas las telas y partes duras. En cuanto a las patas, las separamos del cuerpo y les damos unos golpes con un martillo de madera (yo no tenía y usé el martillo de toda la vida). y una vez preparado para que sea más fácil de comer en la mesa, lo disponemos armoniosamente en una fuente, y a la mesa.

Sopa de miso

     Una sopa que he descubierto recientemente y que me encanta, pues tiene un sabor muy delicado, y me resulta muy reconfortante. Quizá porque la primera vez que la tomé estaba en un sitio desconocido, haciendo algo muy nuevo para mí, rodeada de personas desconocidas, excepto una amiga, en mi cumpleaños, y en una noche fría en medio de la montaña. Esto queda en mi recuerdo asociada a esta sopa, y me encanta recordarlo cada vez que la hago.

Ingredientes

  • Caldo dashi
  • Alga wakame rehidratada
  • 1 cucharada de miso blanco por comensal
  • Tofu


     No sé si esta es la versión original, y si no lo es, pido disculpas a los japoneses, que a mí también me molesta ver a qué llaman paella a veces, pero es la que yo hago, sacada del blog  Japonísimo, y a mí me gusta mucho.
     Empezamos por calentar el caldo sin que llegue a hervir, apartamos un poco y en él disolvemos el miso, que no debe hervirse para que no pierda sus propiedades, lo volvemos a incorporar al cazo, añadimos el alga y el tofu, calentamos sin hervir, y servimos en los cuencos.
     Y, como he leído en ese blog, la sopa admite variaciones. Yo a veces le pongo el tofu frito, también le he puesto verduras cortadas muy finas, las suelo cortar con el pelapatatas, tales como cebolleta, zanahoria, champiñones, setas shitake,....e incluso una vez le puse fideos de arroz.
     Esta sopa y este ingrediente ya ha pasado a formar parte de mi cocina habitual, porque me encanta.


Pan de espelta

     Un nuevo tipo de pan. me ha salido menos esponjoso que el normal, pero está muy bueno. la receta la he sacado del blog Pepebar.


Ingredientes

  • 600 gr de harina integral de espelta
  • 50 gr de levadura fresca
  • Una cucharadita de sal
  • Una pizca de azúcar
  • 360 gr de agua tibia

     Desmenuzar la levadura en la harina, añadir la sal y el azúcar,  el agua, amasar 8 minutos en la amasadora , con el gancho, velocidad 1-2. Poner en un cuenco aceitado, tapar y dejar reposar 45-60 min, en un sitio cálido. Hacerle la greña con un cuchillo bien afilado ( yo tengo un cutter en exclusiva para este menester).
     Volver a amasar, dar forma al pan y ponerlo sobre una bandeja, molde,...dejar reposar otros 30 min.
     Precalentar el horno a 200ºC, pulverizar agua en el suelo y paredes para generar vapor y que la corteza sea mejor (hacerlo también a media cocción),meter el pan y hornearlo durante unos 30 m. al golpearlo, debe sonar hueco.
     Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.